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5. Este monumento es un busto de bronce en honor al pintor aragonés Manuel Viola. Antes estaba en el parque que hay detrás del Colegio La Jota. Allí se puso en 1982, cuando la urbanización que véis y que se llamaba “El Colector” pasó a llamarse Manuel Viola. Este busto fue esculpido en bronce  por el escultor Miguel Cabré Cazcarra. En el año 2013 un vecino  vio como estaban horadando el hormigón del pedestal y avisó a la policia de que alguien quería robarla, seguramente para obtener el bronce y fundirlo. La escultura fue desmontada por el Ayuntamiento y tras realizar un nuevo pedestal de mármol, en julio de 2015, la obra fue reubicada en el parterre existente en la confluencia de la calle Manuel Viola con Balbino Orensanz. El pintor José Viola Gamón nació en Zaragoza en 1916 y murió en San Lorenzo de El Escorial en 1987. Al acabar la Guerra Civil Española adoptó el nombre más conocido de Manuel Viola. Viola fue un pintor de estilo abstracto perteneciente al grupo El Paso  cuya carrera se desarrolló fundamentalmente en Aragón.

6. En 1986, el Ayuntamiento quería conmemorar el Centenario del Certamen de Jota de las fiestas del Pilar. Para ello encargó al escultor Carlos Ochoa Fernández (el mismo que en 1992 haría “La Bañista” del Parque de la Memoria) una obra. La escultura que hizo fue una figura de casi tres metros de altura, de un jotero en el momento de empezar a cantar, sobre un pedestal de hormigón. Se ubicó en el Parque Royo del Rabal y se realizó con materiales de fibra de vidrio y poliéster.

7. La Parroquia de San Pio X, proyectada por Antonio Tello en 1973, refleja un diseño adelantado a su tiempo. No atiende a ninguna corriente arquitectónica conocida.  El 15/11/73 fue acabada la Parroquia con espacio para 300 personas; ha sido considerada como una maravilla arquitectónica de la Margen Izquierda. Inicialmente su primera fachada fue de color negro. El complejo parroquial S. Pio X, ofrecía servicio de iglesia, biblioteca, club de ancianos y guardería para 300 niños de maternales a primaria. Esta iglesia es tan especial que se mire desde donde se mire siempre parece distinta.

8. Esta barca de 11 m. de eslora por 2,50 de manga, había llevado mercancias por el Canal Imperial y sus últimas navegaciones fueron llevando remolacha por el Ebro. La Asociación de Vecinos de Vadorrey al enterarse que se vendía, la compró como chatarra e inició gestiones para colocar una barcaza remolcadora como monumento en una zona verde. En 1987,  La barca restaurada se convirtió en un símbolo de la defensa de las aguas y las riberas del río. Está ubicada en los jardines de Vadorrey al lado de la calle Nobleza Baturra y tiene la siguiente inscripción:

Yo en monumento convertido/Cumplo mi último servicio/Homenaje a tus aguas Ebro/De un pueblo agradecido.

9. En 1991 se inauguró el Parque de la Esperanza. El Monumento a los Niños, obra de Carlos Pérez de Albéniz, se inauguró en 1991, en homenaje a las once víctimas (seis adultos y cinco niñas) del atentado que cometió la organización terrorista ETA en la casa cuartel de la Guardia Civil de la Avenida Cataluña, donde vivían cuarenta familias.  Hubo 11 muertos, 5 de ellos niños, y 40 heridos. Numerosas viviendas y comercios de la zona quedaron destrozados: cristales rotos, marcos de ventanas y puertas arrancados, techos derribados…y decenas de personas que estaban en sus camas cuando se produjo la explosión, se echaron a la calle para comprobar lo ocurrido. Todavía se recuerda tan triste noticia por los mayores del Barrio. El conjunto escultórico consta de cuatro figuras: dos jóvenes, una  niña y un perro. El Parque de la Esperanza es muy frecuentado por niños y familias. Y es habitual ver a chavales que juegan con estas figuras de bronce o se deslizan por el 'tobogán' de mármol que hay en mitad de la plaza.

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